El mármol blanco carrara se extrae de la cantera de los Alpes Apuanos localizados al norte de Toscana de Carrara. Es sumamente apreciado no solo por su blancura, la cual puede tener tonalidades grisáceas o azuladas, sino porque casi no posee vetas y tiene un grano muy fino de aspecto harinoso.
Su extracción tiene orígenes muy antiguos; incluso en la Edad del Cobre se utilizaba este mármol para fabricar objetos de diversos géneros y utilidades, especialmente en los equipos tumbales.
Era considerado como material de lujo para la construcción de la arquitectura noble de antaño, utilizado para estatuas, columnas y decoraciones de suma exquisitez. En la actualidad continúa gozando de la misma fama, y no son pocas las personas que cada día apuestan por esta hermosa pieza para el interior de sus hogares.
Características del mármol Blanco Carrara
El mármol blanco carrara es una roca gruesa y uniforme, con vetas azul grisáceas. Posee una singular elegancia, brillo y resistencia, la cual lo convierte en un mármol perfecto para baños e incluso oficinas.
Con un acabado envejecido, pulido y apomazado, es perfecto para la creación de ambientes que griten lujo y elegancia.
Por su alta resistencia, se puede emplear en la construcción, la creación de esculturas y motivos decorativos. Posee un color que va del blanco al blanco perla, con granos refulgentes y vetas de color grisáceo que se esparcen a lo largo de la piedra de manera irregular.
Se encuentran tres variedades de mármol de Carrara, las cuales se manifiestan debido al tono de la masa de fondo, también conocido como matriz.
Características del mármol
Variedad C. Tiene una masa de fondo blanca y pulcra, con un sutil veteado que apenas se marca.
Variedad C/D. Con un fondo regular, no tan blanco como el anterior. Suele tener un tono más azul grisáceo y de vetas más marcadas.
Variedad C. Su masa de fondo es oscura, de color más bien gris con vetas irregulares que hacen un contraste llamativo.
Subvariedad P. También conocida como bianco, este tipo de mármol es altamente valorado debido a su homogeneidad; no posee vetas, de manera que tiene un color blanco puro y uniforme.
Pulido del mármol
Para la limpieza de tus pisos de mármol, lo primero que debes hacer es desmancharlo con un líquido especial, o si lo prefieres, puedes preparar tu propio producto de manera sencilla y económica. Únicamente debes añadir tres cucharadas de bicarbonato en ¼ de agua mineral, hasta que consigas una pasta homogénea. Tras la eliminación de manchas, se debe limpiar y secar el área por completo. Para esto, utiliza un paño de microfibra seco y limpio, y pule toda el área de manera suave. Asegúrate de eliminar todo rastro de polvo, arena y suciedad.
Cabe recalcar que, para un pulido perfecto lo más idóneo es contratar los servicios de profesionales que posean no solo los conocimientos necesarios para la tarea, sino que además cuenten con la herramienta especial para el pulido de este y otros tipos de mármol.
Como has podido observar, el mármol blanco carrara es sinónimo de arte, belleza, resistencia y durabilidad, que aportará a tus espacios lujo, sofisticación y elegancia.
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