Los pisos de porcelanato suelen ser utilizados en diversos espacios tanto de sitios comerciales como residenciales. A continuación, vamos a ver las características que han convertido a este material en el favorito para todo tipo de pisos.
Características de los Pisos de Porcelanato
Este material es de una composición muy cercana a la de los pisos cerámicos. De hecho, ambos tipos de materiales se componen de arcillas que luego son cocidas a elevadas temperaturas para posteriormente prensarse y secarse.
Finalmente, la masa resultante debe ser tratada para su utilización en muchos tipos de superficies o con variados fines.
Hay distintos tipos de porcelanatos según su producción y utilización, pero se dividen en dos principales: porcelanato técnico y porcelanato esmaltado.
Técnico
El porcelanato técnico ofrece las grandes ventajas que lo han señalado como el material ideal para los espacios comerciales, donde deben resistir al tránsito masivo, continuo y constante.
Y es que se trata de un material realizado por completo de la misma masa, totalmente comprimida, para garantizar esa solidez y resistencia, pero también el hecho de que, si se deteriora la superficie, la cara inmediata inferior lucirá igual al pulirse.
Esmaltado
Básicamente se trata de la misma masa hecha con arcilla blanca, más fina y más pura que la arcilla de color rojizo utilizada en pisos cerámicos, pero se le agrega un proceso de recubrimiento con esmalte.
Ventajas del porcelanato
Gracias a su compresión, adquiere varias ventajas que lo hacen resaltar como el mejor material para pisos.
Una de las ventajas es su resistencia, por lo que se vuelve el piso ideal para sitios muy transitados o incluso de trato rudo como el de la cochera.
Su ausencia de poros, por otro lado, lo vuelve muy resistente a los derramamientos de líquidos y no deja que absorba agua. De ahí que se utilice en exteriores de lugares fríos o muy húmedos.
Cuidados del porcelanato
El porcelanato es un material de fácil trato, resistente y muy versátil. Sin embargo, no darle los cuidados mínimos puede afectar su aspecto y su funcionalidad. Es por eso que se debe dar una limpieza básica continua y un mantenimiento periódico.
Limpieza
La limpieza de porcelanato es muy sencilla. Basta con agua, jabón preferentemente neutro y un trapeador para limpiarlo.
Es importante que la limpieza sea diaria y, en lugares de mucho tránsito, más de una vez al día. Sin embargo, su alta resistencia al agua lo vuelve un material que se ensucia poco y es fácil de limpiar comparado con otros pisos.
Mantenimiento
Como parte del mantenimiento periódico es importante pulir el piso cuando ya se encuentra dañado o viejo.
Principalmente el pulido de porcelanato realizado por profesionales otorga al piso una vida nueva.
Debido a la masa utilizada para su creación, la capa pulida cede la superficie a otra perfectamente lisa y del mismo color y brillo que tenía la superficie inicial cuando se estrenó.
Los pisos de porcelanato son y seguirán siendo la mejor opción para pisos en espacios comerciales gracias a su resistencia, fácil limpieza y un mantenimiento sencillo aunados a una estética elegante.
Conoce qué son los pisos de porcelanato y las diferencias con la cerámica.
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